Sin duda Michoacán tiene grandes personas que destacan por su gran entrega y dedicación dentro y fuera del estado

César Hernández-@CesarHdzNoti

Los michoacanos podemos ser muy chingones y así lo demostró José Eduardo Ortiz Reyes, quien forma parte del Ejército de los Estados Unidos, pero que sin duda tiene un orgullo muy especial por sus raíces.

“El hecho de saber que los michoacanos podemos ser muy chingones en muchas cosas, y no hay nada que nos ponga límites para hacer lo que queremos”, expresó el joven

El originario de Coeneo, Michoacán, migró a los 17 años, para enlistarse en las fuerzas armadas norteamericanas, más tarde su disciplina, trabajo y compromiso, lo llevaron a ser parte fundamental de los abanderados.

Su arduo trabajo mostró sus frutos este domingo cuando volvió a hacer historia, ya que durante el himno nacional en el Super Bowl LVII, fue en representación de todo el Ejército Norteamericano, mientras millones de personas en todo el mundo admiraron la bandera de las barras y las estrellas.

“Es un sentimiento muy bonito, es un sentimiento muy chingón poder estar al frente de millones de personas presentes, y millones de personas más en la televisión, y poder decir que yo nací y crecí en Michoacán, es algo muy chingón la neta”, expresó durante la entrevista exclusiva.

Eduardo forma parte de la escolta nacional de los Estados Unidos, y ha participado en eventos internacionales de suma importancia como la toma de posesión del Presidente Joe Biden, o la visita de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) a la Casa Blanca, y del propio Volodímir Zelenski, Presidente de Ucrania.

Ortiz Reyes admitió que busca ser inspiración para otros jóvenes, y que estos tengan un impulso de hacer cosas buenas, añadió que el ser parte de estos grandes eventos se lo debe en gran parte a sus padres, y principalmente una dedicatoria especial:

“Mi abuelita que está es el cielo, falleció este año, me hubiera gustado mucho que me viera, que hubiera visto a su nieto ahí, pero lamentablemente me tocó dedicárselo hasta el cielo”, expresó.

Con mucha humildad y con el buen ánimo que siempre lo caracteriza, se dice sentir michoacano, y nunca se olvida de sus raíces que están en un pueblo llamado Coeneo, y ahora forma parte de la historia del campo de futbol americano del State Farm Stadium en la ciudad de Glendale, Arizona.