Desde hace aproximadamente un mes, la empresa «Medicus» que prestaba los servicios de anestesia al Hospital Civil «Dr. Miguel Silva» se llevó su equipo debido a la falta de pago por parte de la Secretaría de Salud en Michoacán (SSM) dejando al hospital trabajando «con equipo viejo» por lo que las cirugías en el nosocomio aunque se están programando de manera habitual, se han reducido a menos de la mitad por lo que los trabajadores hicieron el enésimo llamado a la secretaria del ramo a fin de que el problema sea atendido y los usuarios no tengan que padecer el problema.
Los empleados consideraron que el problema reside principalmente en que la SSM insiste en subrogar servicios a empresas pagando millones de pesos dinero con el cual, podría adquirir equipo propio que puede ser de mayor beneficio ya que la SSM cuenta con el recurso humano y las instalaciones adecuadas pero hasta hoy, prefieren pagar a empresas foráneas sin que algún secretario lo haya querido hacer «quien sabe por qué motivos», .
Y es que detallaron que tras la salida de la empresa que prestaba el servicio de anestesia en el hospital, los médicos «sacan las operaciones como pueden» con solo dos máquinas viejitas pues a la fecha, realizan entre 5 o 6 operaciones al día cuando antes con el equipo indispensable, realizaban entre 25 o 30 diariamente.
Por su parte el Doctor Raúl León García, precisó que ellos ya están acostumbrados a sacar el trabajo aún sin el equipo necesario a pesar de los riesgos que conlleva incluso legales, y conminaron a la titular, Silvia Hernández Capi para que en lugar de hacer «teatros» y declaraciones con el fin de quedar bien con sus jefes y avisar cuando visite el hospital para que las áreas donde pase sean «arregladas», acuda de manera sorpresiva y se dará cuenta de la molestia de la gente por la falta de insumos y la tardanza en la atención a la ciudadanía por no contar con los espacios necesarios para brindar un mejor servicio.
Añadió que «es raro» que se siga con la misma inercia de secretarios anteriores que se han empeñado en subrogar a diferentes empresas los servicios de lavandería, intendencia, cocina, anestesia así como algunos estudios de laboratorio cuando muchos de esos servicios bien se podrían realizar por parte del mismo personal sin tener que pagar cantidades millonarias «quien sabe a quién».
De los insumos ya ni quiso hablar, solamente dijo que es bien sabido que medicamentos, uniformes, comida y hasta recetas, hacen falta y resulta que ahora, Silvia Hernández dice que en la Secretaría de Salud, todo está funcionando casi al 100 por ciento.