Morelia, Michoacán. — “Ningún mexicano, ninguna mexicana quiere que los jóvenes se acerquen a los grupos delincuenciales”, expresó la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, al ser cuestionada durante la “mañanera del pueblo” sobre la edad del presunto homicida del presidente municipal de Uruapan, Carlos Manzo Rodríguez.
La mandataria lamentó que por 36 años los jóvenes fueron abandonados, y destacó que apenas en los últimos seis —durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador— se ha comenzado a revertir esa situación mediante políticas de educación, cultura y atención a las causas.
“A través de la cultura, del deporte y de la educación debemos ofrecer a los jóvenes opciones reales, para que no vean en la delincuencia organizada una alternativa de vida”, enfatizó Sheinbaum.
Atención a las causas, no sólo fuerza
La presidenta subrayó que una estrategia de seguridad debe incluir tanto la presencia de fuerzas policiales y federales, como acciones de inteligencia, investigación, coordinación y judicialización, pero sin dejar de lado la atención a las causas sociales.
Reprochó que sectores de la oposición hayan tergiversado la política de “abrazos, no balazos”, asegurando que se trataba de indulgencia hacia el crimen:
“Falso. Nadie habló de abrazar a la delincuencia. Se trata de acercarse a los jóvenes. Les llamaron ninis, rechazados; nosotros decimos que debemos hacer todo lo posible para que ninguno se acerque a un grupo criminal.”
El caso Carlos Manzo
Sheinbaum reiteró que el objetivo del próximo “Plan Michoacán por la Paz y la Justicia” es fortalecer esta visión integral, enfocada en prevenir que los jóvenes sean reclutados por la delincuencia organizada.
“Tiene que haber más escuelas, más cultura, más deporte. Los jóvenes deben sentirse atendidos y no ver en un grupo delincuencial una opción que, aunque parezca dar recursos, al final es una opción de muerte”, sostuvo.
El miércoles, el fiscal general de Michoacán, Carlos Torres Piña, informó que el autor material del homicidio de Carlos Manzo fue identificado como Víctor Manuel Ubaldo Vidales, de 17 años, originario de Paracho, cuyo cuerpo ya fue entregado a sus familiares para su inhumación.
