Tokio, Japón. Un sismo de magnitud 6.9 se registró este lunes 13 de enero al suroeste de Japón, con epicentro en la región de Hyūga Nada, a una profundidad de 30 kilómetros. El movimiento telúrico activó una alerta de tsunami para las prefecturas de Kochi y Miyazaki, según informaron autoridades locales.
El temblor ocurrió a las 21:19 hora local y fue percibido con gran intensidad en las llanuras del norte de la prefectura de Miyazaki. Minutos después, a las 21:29 horas, las autoridades emitieron una alerta de tsunami, instando a la población a evacuar las áreas costeras de inmediato.
«Estar en el mar o cerca de la costa es peligroso. Por favor abandone la costa inmediatamente. No regrese hasta que se levante el aviso», advirtieron las redes de Prevención de Desastres de la Oficina del Gabinete de Japón.
#NEWS – Un #terremoto di #magnitudo 6.9 è stato registrato nel sudovest del #Giappone, nella regione di #kyushu
Emesso allarme #tsunami nelle prefetture di #Miyazaki e #Kochi
L’Agenzia meteorologica nazionale (#Jma) indaga se il #sisma sia da collegare a un ulteriore aumento… pic.twitter.com/ZDcGcXTWtl— Tv2000.it (@TV2000it) January 13, 2025
A pesar de la magnitud del sismo, no se registraron víctimas mortales ni daños materiales considerables en la región afectada. La alerta de tsunami fue levantada después de dos horas, tras confirmarse que no existía peligro inminente.
El gobierno japonés, conocido por su preparación y respuesta ante desastres naturales, movilizó equipos de emergencia para monitorear las zonas vulnerables y garantizar la seguridad de la población.
[Tsunami Advisory Lifted]23:50 JST on 13 Jan 2025, A tsunami advisory has been lifted for Kochi Prefecture <and widespread areas>.
— 内閣府防災 (@CAO_BOUSAI) January 13, 2025
Este terremoto pone de manifiesto la eficacia de los sistemas de prevención y alerta temprana de Japón, uno de los países más sismológicamente activos del mundo. La región de Hyūga Nada, ubicada cerca del límite de placas tectónicas, es conocida por su actividad sísmica recurrente.
La población sigue atenta a las recomendaciones de las autoridades, mientras los organismos de protección civil continúan con sus labores de evaluación.
El incidente reafirma la importancia de la preparación ante fenómenos naturales en una nación acostumbrada a lidiar con terremotos y tsunamis, y deja un mensaje de tranquilidad al no reportarse pérdidas humanas.