Morelia, Mich., Ante la detención de al menos 300 jóvenes por parte de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) el diputado presidente de la comisión de Gobernación en el Congreso del Estado. Mario Armando Mendoza Guzmán, solicitó al presidente de la Mesa Directiva solicitar información al Ejecutivo Estatal y buscar establecer un punto de acuerdo para exigir frene estas redadas que calificó de ilegales.

Durante la sesión de la comisión de Gobernación, el diputado del PRI, solicitó que el Congreso asuma una postura frente a estas acciones en donde se conoce que la Comisión Estatal de Derechos Humanos ha integrado 112 expedientes, mientras que 20 personas interpusieron un amparo.

“Sin duda alguna, primero que hay esperar que la Comisión Estatal de Derechos Humanos nos dé más elementos que están entrando, por eso le hice la petición al presidente de la Mesa, yo creo que al gobernador lo están engañando funcionarios, no le están diciendo las cosas como son, pero aparte esto es un detonante del carácter social. No lo habíamos visto en ningún lugar, no se había dado de esta manera en México, no se quien se le ocurrió esta brillante idea”, recriminó el legislador.

La diputada presidenta de la comisión de Derechos Humanos en el Congreso del Estado, Andrea Villanueva, se sumó a la petición del legislador priista, en donde solicitó atender una situación tan grave.

Pascual Sigala Páez presidente de la Mesa Directiva en el Congreso del Estado, dijo desconocer quien dio la orden para detener a estos jóvenes, ni las motivaciones con o sin razón, sin embargo, dijo sería delicado se violen los derechos humanos de las personas que fueron detenidas.

“Espero conocer la información antes de emitir una opinión más allá, la preocupación que tendría es la violación de los derechos humanos a los muchachos”, refirió el diputado local, al exponer que es un tema de derecho y seguridad, y habrá que conocer en qué condiciones fueron recluidos estos jóvenes.

De acuerdo con el diputado priista el primer reporte fue de 120 jóvenes fueron llevados a la barandilla, y luego en autobuses a este improvisado Centro de Readaptación, en total fueron alrededor de 300, en su mayoría son jóvenes de 18 a 30 años, “pero el tema es que es ilegal, es una redada y razia, es porque como te veo te llevo”, reiteró.

Mencionó que los padres de familia cuando se enteraron anduvieron preguntando en la PGR y la morgue, el argumento fue que fueron detenidos para hacerles estudios y saber si tenían adicciones, pero esta sostuvo no es la medida.