Earl se ha convertido en el fenómeno meteorológico que más muertes ha causado en los últimos tres años en México. El huracán, degradado a tormenta tropical el viernes, dejó al menos 48 víctimas en los Estados de Puebla, Veracruz e Hidalgo. Las autoridades no descartan que el número de fallecimientos aumente porque el Ejército continúa los trabajos de rescate en las zonas afectadas por deslaves y desgajes de cerros.

Las muertes colaterales que ha dejado Earl han superado a las víctimas registradas por el paso de diez huracanes en el último trienio. De acuerdo a un conteo realizado por el diario El Universal, esta decena de fenómenos meteorológicos provocó 39 muertes desde mayo de 2014. Odile ocasionó 13 muertes en cuatro Estados, entre ellos cuatro extranjeros en Baja California Sur. El huracán tocó tierra en septiembre de 2014 con una categoría 3 (sobre 5) con vientos de 110 kilómetros por hora. El año pasado, Patricia tuvo la atención de todo el país porque fue considerado el huracán más potente de la historia del Pacífico, categoría cinco, pero se degradó rápidamente en cuanto tocó tierra. Aun así provocó seis muertes en Jalisco, al oeste del país.

Este lunes, Luis Felipe Puente, director de Protección Civil del Gobierno mexicano, informó que Earl ocasionó la muerte de 41 personas, 12 en Veracruz y 29 en Puebla. La cifra ha aumentado en las últimas horas mientras se actualizan reportes de comunidades alejadas de los centros municipales.

 El síndico de Naupan, Puebla, informó esta mañana que las autoridades encontraron a seis personas de una misma familia muertas tras ser sepultadas por el desgaje de un cerro. Se trata de tres adultos y tres menores.

La mayoría de las víctimas quedó sepultada por el lodo desprendido de los cerros en las zonas rurales de estas entidades tras las copiosas lluvias. En la Sierra Norte poblana, al noreste de la Ciudad de México, en ese municipio, fallecieron siete menores de edad y seis adultos. En otra región murieron once personas, ocho menores y tres adultos. El cuerpo de otro hombre fue encontrado sobre la carretera de entrada al pueblo. En Tlaola los deslaves mataron a tres personas. El Gobierno mexicano envió ayuda para cubrir las necesidades alimentarias, de salud y de abrigo a los damnificados de Huauchinango, Tlaola y Xicotepec.

En Hidalgo, un Estado vecino a Puebla, un joven de 15 años que había acudido a una fiesta durante el fin de semana murió por el desgaje de otro cerro. En Veracruz, el gobernador Javier Duarte, informó de la muerte de doce personas en los municipios de Coscomatepec, Tequila y Huayacocotla. Las fuertes lluvias también han llevado a más de 1.200 habitantes de estas zonas a albergues. El nivel de tres ríos de esa entidad está en estado crítico y podrían desbordarse si las lluvias continúan su ritmo.