La administración de Obama invertirá hasta 4.5 mil millones de dólares para construir estaciones de carga para coches eléctricos, y crear una red que se expanda de costa a costa en EU para reducir distancias y potencialmente mejorar la aceptación de los vehículos de emisiones bajas.

El Departamento de Energía daría préstamos para apoyar las estaciones de carga a un nivel comercial, con alianzas federales, estatales y locales con productores de coches como Ford Motor Co., General Motors Co., Nissan Motors Co. Y Tesla Motors Inc.

La infraestructura de carga ha sido “uno de los obstáculos” para expandir la adopción de los coches eléctricos», menciona Lynn Orr, subsecretaria de ciencia y energía del Departamento de Energía.

El primer motivo para comprar un coche es la línea estética y el segundo, el precio. La contaminación medioambiental no está ni entre los diez primeros motivos, pero esto cambiaria si se prohíbe circular por las ciudades, se ponen un peaje o se obligan a pagar un impuesto, es posible que el vehículo eléctrico sea un fin a la hora de entender las nuevas formas de movilidad.

Las ciudades serán las grandes beneficiadas y cuando éstas apuesten de forma decidida por ello, será fundamental para conseguir que la gente vea que esto funciona de manera eficaz y eficiente energéticamente.

Los desarrolladores de auto están apostando en grande por los coches eléctricos, en parte para satisfacer los estándares de la economía en cuestión a gasolina que proyectan que la flota de vehículos será capaz de recorrer 50 millas con un galón de gas en 2025. Ford está invirtiendo 4.5 mil millones de dólares para añadir 13 nuevos vehículos eléctricos para 2020. GM está agotando el Bolt, etiquetado como el primer auto eléctrico de largo alcance.