Una buena educación supone también correcciones, ya que el Señor corrige a los que ama, sostuvo el cardenal Alberto Suárez Inda durante la homilía de la misa de las 9:00 de la mañana de este domingo, misma que cumple 10 años de ser transmitida por televisión.

Expuso el Cardenal que el buen maestro tiene que ir enseñando con buen modo, no con violencia, ni con amenazas, aunque sí con cierta exigencia; debe mostrar cómo enderezar el camino, cómo formar la conducta, cómo encausar las pasiones y los sentimientos.

Con este mensaje el cardenal llamó a todos los involucrarnos en el qué hacer educativo, que no sólo se limita al ciclo escolar, sino a la catequesis, o a los cursos deportivos o culturales, a dar lo mejor de sí.

“Un nuevo curso siempre es una nueva oportunidad de educarse, de tener virtudes. Jesús nos dice en el Evangelio que no es barato el precio de la felicidad; no es fácil, es necesario esforzarse y entrar por la puerta angosta. A veces queremos que todo sea cómodo, que todo sea a nuestro gusto”.

Aseguró que Jesús nos dio la muestra aceptando el sacrificio y la obediencia al Padre para demostrar el amor para salvar al mundo.